Construcción lidera crecimiento costarricense

La economía costarricense está dividida desde hace mucho tiempo en dos. Por un lado las zonas francas que crecen a tasas chinas con cifras de dos dígitos. Por el otro, el régimen definitivo que en los últimos años mantenía un promedio del 2%. Por Javier Adelfang, economista jadelfang@inversioninmobiliariacr.com La economía costarricense está dividida desde hace mucho tiempo en dos. Por un lado las zonas francas que crecen a tasas chinas con cifras de dos dígitos. Por el otro, el régimen definitivo que en los últimos años mantenía un promedio del 2%. Pero durante los últimos meses el régimen definitivo ha mostrado tasas de crecimiento superiores al 4%, y esa aceleración ha sido impulsada por la construcción privada. El sector privado lleva cinco meses consecutivos de crecimiento y en agosto (último dato disponible) alcanzó una tasa interanual del 43,3% (es decir, comparado contra el mismo mes de 2022), según el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE). La ejecución de proyectos no residenciales tales como edificios de oficinas, locales comerciales y estacionamientos explican buena parte del crecimiento, además, hubo un aumento en los proyectos de edificios de apartamentos y viviendas para grupos de ingresos medios y altos, según señala el informe del Banco Central. Sin embargo, hay que tomar con calma estos datos, ya que existe un efecto “base”, que es un fenómeno estadístico que hace las cifras parezcan mayores de lo que son, ya que el crecimiento de 2023 se compara con una caída del 19% durante agosto de 2022. “El resultado se ve muy fuerte porque se está comparando proyectos que ya se venían arrastrando desde 2022 e incluso algunos del 2021 y entonces en la actualidad cuando ya los proyectos están maduros, si se compara con el pasado cuando estaban en inicio o estaban detenidos obviamente el valor del proyecto en la actualidad es mucho mayor, y por eso se ven los indicadores muy espectaculares” comentó Melizandro Quirós, Director de República Inmobiliaria Consulting. Más allá del efecto estadístico, las cifras son positivas y es el sector residencial una de las explicaciones del éxito. “Esta mejora del sector está muy focalizada en un sector residencial de clase media alta y también incluso focalizado en la zona de Guanacaste, donde hay proyectos que se arrastran del 2022 de vivienda de clase turística de lujo que se están terminando y que obviamente desde el punto de vista de medición en cuanto a la cantidad de metraje con respecto a lo que era el inicio, se ha aumentado” agregó Quirós. Otra parte importante del impulso está dado por las industrias y empresas de servicios en zonas francas, que en agosto mostraron un crecimiento interanual del 16,2% y que mantuvieron activa la demanda de obras. Lea también: Desafíos Inmobiliarios del Futuro: ¿Desaparecerán $800 mil millones por Menor Demanda de Oficinas? En cuanto a la construcción pública en agosto mostro un crecimiento de 2,8%, una cifra moderada en comparación con el desempeño del sector privado, pero que genera una expectativa positiva si se tiene en cuenta que es el segundo mes consecutivo de crecimiento y que llevaba 36 meses seguidos de caída. El crecimiento obedece a un incremento en la ejecución de obras en carreteras, caminos, puentes y otros proyectos de parte de las municipalidades, del Consejo Nacional de Vialidad y del Ministerio de Obras Públicas y Transporte, según indica el Banco Central. La comparativa Las últimas cuatro mediciones del IMAE posicionan al sector de la construcción como el líder del régimen definitivo que, sumando al sector privado y público, tuvieron un crecimiento promedio del 30,6% que significó más de la mitad del incremento total del régimen definitivo. En el segundo puesto, aparecen las actividades profesionales que tuvieron un crecimiento del 12,6%, luego la industria manufacturera 8,6% y el transporte con 5,8%. Gráfico 1: La construcción lidera el crecimiento en Costa Rica Fuente: IMAE – Banco Central © 2023. Revista Inversión Inmobiliaria SRL. Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción parcial o total.