Desafíos Inmobiliarios del Futuro: ¿Desaparecerán $800 mil millones por Menor Demanda de Oficinas?

En las ciudades norteamericanas analizadas, el volumen de transacciones inmobiliarias disminuyó en un 57%, el precio promedio de venta por pie cuadrado cayó un 20%. La pandemia ha dejado una profunda marca en el mercado inmobiliario y los retos a futuro son enormes. La disminución de la demanda de oficinas plantea una pérdida potencial de $800 mil millones para 2030. Por Javier Adelfang, economistajadelfang@inversioninmobiliariacr.com La pandemia ha dejado una profunda marca en el mercado inmobiliario y los retos a futuro son enormes. La disminución de la demanda de oficinas plantea una pérdida potencial de $800 mil millones para 2030, según un estudio de la consultora McKinsey. El estudio se centró en las ciudades de Beijing, Houston, Londres, Múnich, Nueva York, París, San Francisco, Shanghái y Tokio, y analiza el impacto de los cambios de comportamiento, como la menor asistencia a las oficinas, la acelerada migración fuera de las ciudades y la disminución del comercio en vecindarios centrados en oficinas en la demanda de bienes raíces comerciales hasta el año 2030. Sector Oficinas: Declive en la Demanda El informe destaca que la demanda de espacios de oficina ha disminuido considerablemente desde 2019, en parte debido al aumento del trabajo remoto y en parte debido a un entorno macroeconómico complejo. Esto se refleja en tasas de vacancia más altas en todas las ciudades estudiadas. En las ciudades norteamericanas analizadas, el volumen de transacciones inmobiliarias disminuyó en un 57%, el precio promedio de venta por pie cuadrado cayó un 20% y el valor de arrendamiento promedio se redujo casi un 22%, en términos reales, entre 2019 y 2022. San Francisco, cuna de las empresas tecnológicas, es una de las ciudades más afectadas, con un 10% más de espacios de oficina vacíos en 2022 en comparación con 2019. Además, la disminución de la demanda ha llevado a acuerdos de arrendamiento más cortos entre inquilinos y propietarios, lo que, a su vez, dificulta la obtención de financiamiento y modifica las valoraciones bancarias que dependen de la duración de los arrendamientos existentes, según indica el informe. Respecto al futuro, los diversos escenarios planteados señalan que en la mayoría de las ciudades, la demanda de oficinas recién regresará a los niveles pre pandémicos en 2030. Sin embargo, al plantear un escenario severo, la consultora señala que la demanda podría ser hasta un 38% menor que en 2019, que se traduciría en la pérdida potencial de $800 mil millones en valor de bienes raíces de oficinas. Para poder revertir la situación, desde la consultora señalan que los propietarios deben establecer una relación diferente con los inquilinos y proporcionar servicios que realmente ayuden a esos inquilinos a lograr mejores resultados. Lea también: ¿Son los espacios de coworking más rentables que los contratos de arrendamiento tradicionales? “Los cambios pueden incluir plazos de arrendamiento más cortos y flexibles. los espacios de oficina deben ganarle la pulseada al teletrabajo y eso se logra creando espacios donde las personas realmente deseen trabajar. Los actores del mercado inmobiliario deben demostrar a los empleadores que lugares de trabajo de mayor calidad pueden llevar a una mayor asistencia, un mayor compromiso de los empleados y una mejora en las medidas de productividad” afirmó Aditya Sanghvi socio senior de McKinsey - Nueva York. Locales Comerciales: Menos Demanda El informe también puso el ojo en el sector comercial, señalando una disminución en la demanda de locales, especialmente en ubicaciones céntricas alrededor de oficinas. Esto se debe a la reducción del tránsito peatonal cerca de tiendas durante la pandemia, lo que ha llevado a un aumento en la vacancia y a la disminución de las rentas. Así, las tasas de vacancia aumentaron en todas las ciudades estudiadas, y el alquiler promedio disminuyó un 5,4% (en términos reales) entre 2019 y 2022. Para 2030, el estudio proyecta que la demanda de espacios comerciales será menor que en 2019 lo que llevará a una disminución de la renta promedio y señala que la disminución se daría incluso si la pandemia no hubiera ocurrido, debido, entre otros factores, al aumento de las compras en línea. Por ejemplo, en el centro urbano de San Francisco, se prevé que la demanda sea un 17% menor en un escenario en el que haya un retorno parcial a la oficina y, por lo tanto, una recuperación parcial del gasto en comercios cercanos a las oficinas. En un escenario más severo, la disminución de la demanda alcanzaría un 26%. “La pandemia creó un terremoto, y ahora estamos lidiando con las réplicas. Creo que el imperativo es extremadamente fuerte para actuar, actuar ahora y actuar colectivamente” concluyó Sanghvi. “Los cambios pueden incluir plazos de arrendamiento más cortos y flexibles. los espacios de oficina deben ganarle la pulseada al teletrabajo y eso se logra creando espacios donde las personas realmente deseen trabajar. Los actores del mercado inmobiliario deben demostrar a los empleadores que lugares de trabajo de mayor calidad pueden llevar a una mayor asistencia, un mayor compromiso de los empleados y una mejora en las medidas de productividad” afirmó Aditya Sanghvi socio senior de McKinsey - Nueva York. Fuente: McKinsey © 2023. Revista Inversión Inmobiliaria SRL. Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción parcial o total.