Por Alberto López,
alopez@inversioninmobiliariacr.com 

Foto: Plaza Presidente es un proyecto de inversión por 85 millones de dólares que ya se encuentra en ejecución, para inaugurar a finales de 2018.

San Salvador, la capital salvadoreña como un reflejo representativo del clima económico de El Salvador, viene experimentando un despertar inmobiliario desde hace varios meses, con la construcción de diferentes proyectos en los ámbitos residencial, corporativo de oficinas, comercial y hotelero.

Definitivamente, después de un letargo en el sector y la economía salvadoreña, como reflejan datos de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), que el clima de inversión pasó de “muy volátil”, entre 1999 y 2017, a “establemente negativa”, entre 2008 y 2016.

Mientras que los factores, según Fusades, que más influyen en este escenario en El Salvador son el clima de delincuencia, el ciclo económico y la incertidumbre política y económica.

Precisamente, como un ejemplo del ciclo económico, el encargado del proyecto Plaza Presidente, Marvin Cruz, consideró que se tocó fondo del letargo en el desarrollo de proyectos inmobiliarios en El Salvador y se experimenta ahora un efecto de rebote que y está favoreciendo las inversiones.

[quote width="auto" align="none" border="#002f56" color="#59a3d9" title="dijo el encargado del proyecto Plaza Presidente, Marvin Cruz"]“Se tocó fondo y no se podía caer más. Del letargo que ha habido es como un despertar hoy, el boom está a pesar del retraso de inversión gubernamental, pero la inversión privada en la capital jalará que la inversión mejoré: en obras de agua, carreteras y otros aspectos necesarios para acompañar y apoyar a la inversión privada en infraestructura en San Salvador”[/quote]

Plaza Presidente es un proyecto de inversión por 85 millones de dólares que ya se encuentra en ejecución, para inaugurar a finales de 2018. Se trata de un multiedificio, como lo define su diseñador, el arquitecto Juan José Rodríguez, con una torre de 19 pisos para oficinas, un hotel de lujo (de la línea Sheraton-Starwood), área comercial de mall y un amplio parqueo de cinco niveles en sótano. El proyecto conectará con el actual Hotel Sheraton-Presidente que se encuentra enfrente, enclavado en la exclusiva zona de San Benito, pocos metros del Monumento a la Revolución y el Teatro Presidente.

Precisamente, a juicio de Cruz, el proyecto aportará, de forma favorable, a la imagen urbana, de tal manera que Presidente y otros proyectos más en la ciudad marcarán, dentro de este boom inmobiliario, una época en la imagen de la capital salvadoreña.

En ese sentido, el gerente comercial de Urbánica, Álvaro Barraza, opinó que, como parte de ese boom inmobiliario, en su caso particular han apelado al optimismo, muy propio del perfil salvadoreño, pero que desde la primera década del 2000 vienen también haciendo ese ejercicio de una metodología de análisis de productos y oportunidades reales, pues desarrollaban e invertían cuando otros retrasaban su decisión en plena crisis de 2008-2009.

De esa manera, Urbánica tiene un abanico de proyectos en ejecución y por ejecutar este año y en el siguiente, que van desde el hotelero, residencial, comercial y corporativo, por un monto de inversión global de 362, 47 millones de dólares.

Por su parte, Agrisal levanta también en San Salvador, para inaugurar en noviembre de este mismo año, el proyecto Quatro, un edificio corporativo que vendrá a completar el complejo de Hotel Crowne Plaza, World Trade Center (WTC), Torre Futura y el área comercial de Plaza Futura, todo parte también de Agrisal.

Así, la capital salvadoreña presenta otros desarrollos corporativos en las cercanías del monumento al Divino Salvador del Mundo y pequeños proyectos de vivienda vertical al Sur y Oeste de la ciudad, en una suerte de un repunte que podría también ser una leve mejora en el crecimiento económico del país para este año y que el anterior, con dificultad, alcanzó un 2,5%.