¿Cómo manejar la ansiedad y la angustia provocadas por el coronavirus?

La terapeuta Julia Samuel dice que el ejercicio, las golosinas, los planes a corto plazo e incluso las palabrotas desempeñan un papel importante. Por Redacción INversión INmobiliariainfo@inversioninmobiliariacr.com Todo es tranquilidad dentro de las paredes color azul cielo de una sala en la azotea de una mansión en el oeste de Londres. Afuera, más allá de los cerezos en flor y el brillante día primaveral, se propaga una pandemia, los mercados financieros están en crisis y los trabajadores están perdiendo sus empleos. Éste es el lugar al que vienen clientes de todos los sectores sociales para visitar a Julia Samuel, una autora y psicoterapeuta especializada en la angustia. En estas últimas semanas, conforme el coronavirus domina todas nuestras vidas, se han puesto cada vez más ansiosos: por su salud y la de sus familiares y amigos, así como por las preocupaciones sobre el dinero. [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title=""]"Todas las personas que veo están pasando por dificultades; están pasando por la incertidumbre, el divorcio, la pérdida de sus empleos, el luto", dice ella. "Ya se encontraban en un panorama incierto y esto lo ha intensificado".[/quote] Conocí a Samuel antes de que el gobierno británico anunciara las regulaciones sobre el distanciamiento social y el cierre de escuelas. Su nuevo libro, “This Too Shall Pass” (Esto también pasará), sobre las dificultades de enfrentar los cambios, me motivó a conocerla. El libro, que se basa en sus 30 años de experiencia como terapeuta en el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS) — y en su consulta privada — tratando a padres desconsolados, aborda los temas de la familia, el amor, el trabajo, la salud y la identidad. Yo soy una aficionada de su debut en 2017, “No temas al duelo”, que explora el luto en todas sus formas, incluyendo la muerte de un padre, hermano, pareja e hijo. Como era de esperarse, el coronavirus es un tema inevitable en el transcurso de nuestra conversación. Como dice Samuel, los cambios pueden ser aterradores y complicados, y ponen a prueba nuestras creencias más arraigadas. "Cuando la vida nos trata mal, decimos: 'Esto también pasará', y esperamos que así sea. Pero hay un detalle inconveniente: cuando la vida nos trata bien, también, inevitablemente, pasará. La difícil verdad que debemos enfrentar es que sólo la muerte detiene los cambios de la vida". Conforme aumenta la ansiedad por la pandemia, sigo en contacto con ella por correo electrónico y por teléfono. Su ánimo es muy diferente: "C**ajo, c**ajo", dice por teléfono. "Esto es una mierda. Se ha puesto peor". Incluso cuando Samuel pronuncia las palabrotas (las cuales recomienda como mecanismo de defensa) es una experiencia relajante. La conmoción provocada por el virus en la vida cotidiana — en nuestras vidas sociales, rutinas laborales, escuelas y cuidado de niños — está provocando una gran ansiedad, dice, exacerbada por el hecho de que no hay un "patrón" para enfrentar una pandemia. Hay una sensación generalizada, dice, de que "no hay nadie a cargo que sepamos que lo vaya a resolver. No hay un salvador". Las redes sociales no hacen más que agravar la ansiedad. En lugar de imaginar una catástrofe sobre un futuro desconocido, recomienda mantener los planes en un plazo corto: "No planees las próximas semanas y meses. Planea sólo el presente". Las nuevas estructuras también son importantes: "Somos seres de costumbres. El café que compras, el camino que tomas, la ropa que compras, incluso los pensamientos que tienes cuando caminas por una calle en particular. Los tienes habitualmente cuando llegas a la oficina. Tenemos que crear nuevas estructuras y hábitos que nos den un sentido de voluntad y efectividad". Algunos de nuestros mecanismos habituales de afrontamiento — el alcohol, las drogas, la promiscuidad o el ajetreo extremo — son especialmente inútiles: "Si bloqueas el dolor, bloqueas la alegría y la capacidad de experimentar todos los sentimientos". En cambio, es más saludable aceptar nuestros sentimientos difíciles, con el apoyo de amigos y familiares, junto con el ejercicio. Samuel es una de los cinco hijos de la familia Guinness involucrada en el sector bancario. Su madre y su padre se adhirieron al enfoque de “impasibilidad” ante las emociones. "Eran buenas personas y, como padres, eran muy anticuados". A los 25 años, la madre de Samuel ya había perdido a su padre, su madre, una hermana y un hermano. "Todos los miembros más importantes de su familia habían muerto y nunca hablaron de ninguno de ellos. Había fotografías en blanco y negro en la casa, y sabía vagamente cuál era mi abuelo, cuál era mi tío, pero nunca, nunca se habló de ellos". A los 20 años, Julia se casó con Michael Samuel, un descendiente de la familia propietaria del banco Hill Samuel, que posteriormente fue adquirido por Lloyds. Después de una breve carrera en la industria editorial, se capacitó como psicoterapeuta, y trabajó en el Hospital St Mary's en Paddington, Londres, donde tuvo a sus cuatro hijos. Samuel, quien se describe como una "madre imperfecta", dice que era "ignorante" cuando tuvo su primer hijo a los 21 años. Era una época diferente, donde había menos obsesión con los consejos para los padres. "Prácticamente no había libros en aquel momento". Se dedica ferozmente a sus hijos, y también es pragmática. "Amo mucho a mis hijos, nos llevamos muy bien. Somos increíblemente unidos. Los fastidio mucho". Fueron las emociones reprimidas de su madre las que convencieron a Samuel de que había una mejor manera de llevar el luto. "En muchos aspectos, he vivido una vida muy tradicional, casada y anticuada. Pero también he viajado millones de kilómetros psicológicamente, he trabajado en un hospital durante 25 años, y he tenido miles de experiencias diferentes con miles de personas diferentes". Su función en el St. Mary's era apoyar a las familias cuyos bebés y niños habían muerto. A menudo trataba a refugiados y trabajaba con intérpretes. "Iba a sus casas y trabajaba con ellos en sus casas porque no podían dejar a sus hijos. Fui a las casas de muchas personas de muy distintas procedencias". Sigue vinculada al hospital actualmente mediante su comité de ética, apoyando al personal. "Me encanta ser parte de eso", dice. Samuel, quien fue buena amiga de la difunta princesa Diana, es madrina del príncipe George. La apertura de los príncipes William y Harry sobre las dificultades que tuvieron después de la muerte de su madre, dice, puso de manifiesto la importancia de la terapia para la angustia en el caso de los niños, algo en favor de lo cual ella misma ha hecho campaña. Le digo que una amiga tiene dificultades para ayudar a su hijo ansioso a quien le preocupa que su familia puede morir del coronavirus. Samuel, quien es mecenas fundadora de la organización benéfica Child Bereavement UK, dice que los niños necesitan información veraz, al igual que los adultos. [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title=""]"Hay que averiguar qué entienden. Averiguar sus miedos", dice ella. "Siempre, cuando les das malas noticias a las personas, debes averiguar lo que realmente comprenden. Porque así puedes ayudar a orientarlas. Y luego pregúntales qué les preocupa. Tenemos que darles a los niños la oportunidad de que estén tristes, preocupados y molestos. No los detengas. No los tranquilices exageradamente. Déjalos sentir lo que sienten, y luego déjalos ser niños normales y felices".[/quote] La angustia de un niño es diferente a la de un adulto, señala, algo más parecido a ir saltando por los charcos. "Saltas al charco y te pones muy triste, y luego cinco minutos después saliste del charco, andas muerto de risa, agarrando el juguete de tu hermana y divirtiéndote mucho". Dice que las personas que ya sufrieron el luto previamente podrían estar mejor equipadas para lidiar con estos tiempos de ansiedad, pues saben que pueden sobreponerse. "Sobrevivieron y se sobrepusieron; eso les dará esperanza". [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title=""]Conforme aumenta la cifra de muertes por coronavirus, la angustia será una emoción con la que más de nosotros tendremos que lidiar. En “No temas al duelo”, Samuel escribió: "Parece que nos alegra hablar sobre el sexo o el fracaso, o revelar nuestras vulnerabilidades más profundas, pero sobre la muerte no decimos nada. Es algo tan aterrador, incluso ajeno, para muchos de nosotros que no encontramos las palabras para expresarlo. El dolor que sentimos es invisible, es una herida invisible".[/quote] Una madre desconsolada le dijo después de que su hija murió de una sobredosis de drogas: "Realmente no me he sentido bien de la cabeza. Sólo he estado respirando, no he estado verdaderamente viva". Las muertes en masa, en las guerras o en las catástrofes, pueden resultar particularmente complicadas. Samuel orientó a los familiares afligidos en Londres después del incendio en la Torre Grenfell donde murieron 72 personas en 2017, y después del accidente del tren de Paddington en 1999, en el que murieron 31. "Esperas tener una experiencia compartida, y encontrar una sensación de comprensión mutua", reflexiona. [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title=""]"Y ciertamente puede haberla, pero también puedes sentir que te han robado la singularidad de tu experiencia, y que, de alguna manera, te han lanzado a este club donde todos son viudas o niños afligidos a causa del coronavirus, y pierdes tu singularidad". El luto colectivo puede ser "increíblemente abrumador y confuso, y tratan al colectivo como si fuera una sola persona cuando realmente son personas muy diferentes que sufren".[/quote] Presenciar todo este dolor a lo largo de su carrera como psicoterapeuta, como era de esperar, la "cambió por completo", dice. "Sé muy bien que a la gente buena le pueden pasar cosas malas. Y que las cosas malas pueden pasar de la nada sin razón alguna, porque lo vi todas las semanas". [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title=""]Tiene un costo emocional. "Lloro al verlos tan molestos. A veces lloro con los clientes. No lloro a lágrima viva ni nada de eso. Pero verlos con sus hijos muertos es devastador. Uso muchas herramientas. Y lloro cuando llego a la casa, y escribo notas". La práctica del kick-boxing es uno de sus mecanismos de afrontamiento.[/quote] Dice que los millennials a menudo están mucho mejor equipados para discutir su vida interior que las generaciones anteriores. Sin embargo, le preocupa la tendencia moderna de patologizar los sentimientos normales, como la tristeza y la preocupación, etiquetándolos como depresión y ansiedad y de revelar sus almas a todos. En cambio, deberíamos "abrirnos a nuestros padres, parejas, amigos cercanos y estallar en llanto, sacarlo todo, exagerarlo, hacer un drama, llamarlo trauma. Ellos te apoyan. Tú lloras. Te sientes mejor. Luego te tomas una taza de té y vuelves al trabajo". Julia Samuel ofrece los siguientes cinco consejos para lidiar con el coronavirus: Planifica a corto plazo. Planifica sólo el día de hoy y los próximos días. No intentes conocer el futuro desconocido; eso te volverá loco. Haz ejercicio. Incluso siete minutos en casa resultarán útiles. Bailar en la cocina es bueno para levantar el ánimo y no parecerá una tarea pesada. Todo movimiento ayuda a reducir el estrés de tu cuerpo. Respira. Después del ejercicio físico, intenta un ejercicio de respiración de cinco minutos. Simplemente puede ser inhalar hasta la cuenta de siete y exhalar hasta la cuenta de 11. O usa una aplicación como Calm. Golosinas. Date gusto con tus golosinas favoritas de forma intencional (y preferiblemente no con mucho alcohol). Conéctate con los demás. Puedes hacerlo en línea mediante un enlace de vídeo o por teléfono. © 2020. Revista Inversión Inmobiliaria SRL. Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción parcial o total.