Por Roy Chinchilla U.
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Los números así lo dictan: las empresas consultoras inmobiliarias están creciendo a nivel global y se vio reflejado en el último informe de Real Capital Analytics, el cual muestra que el porcentaje de todo el volumen de operaciones que involucra a un experto corredor aumentó a 62,8% en 2018 y ha aumentado de manera constante a lo largo de los años.

Antes de entender la importancia de la contratación de una firma consultora, conozcamos cuál es el proceso de involucramiento que utilizan algunas de estas firmas con la empresa inversionista.

Daniel Álvarez, Director General de Cushman & Wakefield / AB Advisory, lo conceptualiza como el modelo ideal cuando pueden acompañar a sus clientes desde el inicio de la conceptualización de un proyecto hasta su ejecución. Inclusive, recalca que en la mayoría de los proyectos es valioso continuar el acompañamiento aún después de su ejecución.

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Este aspiracional los hace creer que el mayor valor agregado se produce cuando se convierten en un socio estratégico de las compañías, pues así están evaluando constantemente las oportunidades de optimización con sus portafolios inmobiliarios y vamos ejecutando proyectos, continuamente, para llevar el desempeño de esos portafolios a niveles superiores.

[quote width="auto" align="none" border="#002f56" color="#59a3d9" title="afirma Álvarez"]Por ejemplo, desde la perspectiva de nuevas aperturas de oficinas, nuestra experiencia revela que el momento ideal para involucrarnos es desde la etapa de análisis de los distintos países para llevar las operaciones. A partir de ese momento, nuestro equipo de consultoría estratégica brinda un acompañamiento en el proceso de selección de sitio a nivel país y luego se le apoya al cliente tanto en la construcción como en el desarrollo del caso de negocio para la escogencia de la mejor ubicación dentro de ese Mercado.[/quote]

En Cushman & Wakefield / AB Advisory tienen bastante definido el proceso. El primer contacto inicia con una reunión introductoria, la cual busca entender las bases del negocio del cliente u cuáles son sus necesidades. Después de esa reunión introductoria, analizan diversas variables inmobiliarias, como lo son los requerimientos de espacio, las dinámicas de cultura organizacional, los presupuestos y tiempos; a partir de esa fase, generan un cronograma detallado de trabajo para llevar a cabo cada uno de los proyectos en los que nos involucramos.

“Además, se les da soporte con las negociaciones, los análisis financieros y de otras variables, la administración de la construcción del proyecto e inclusive, una vez que nuestros clientes se han instalado, nos convertimos en su aliado desde la división de Facilities Management, donde se les asiste en la operación y mantenimiento de las instalaciones en sí”, enfatizó.

Dichos proyectos pueden ser muy variables, ya que algunos se ejecutan en 90 días o menos, mientras que otros pueden durar incluso tres años o más para concretarse. Por eso, los cronogramas de trabajo se hacen a la medida de cada cliente, pues cada uno tiene necesidades muy particulares.

Otros como Newmark Knight Frank plantean también el escenario ideal de incorporarse desde la concepción de cualquier proyecto para ofrecer toda la gama de sus servicios desde estudios de factibilidad, estudios de mercado, gestión de proyectos, comercialización (representación de inversionistas), servicios financieros, Project Management y Facility Management, entre otras, que logran cubrir todo el ciclo inmobiliario.

Ventajas de contratar consultoras inmobiliarias

Para una compañía, contratar servicios externos de agentes profesionales inmobiliarios es sinónimo de ahorro en tiempo, dinero y esfuerzos. Estas consultoras no solo viven con la información al día, sino que también establecen una planeación y programación adecuada que permita realizar el plan maestro inmobiliario.

Contar con un asesor inmobiliario profesional permite documentar con total transparencia el proceso de búsqueda, evaluación, selección y negociación del espacio, así como el impacto económico y operativo de cada decisión.

[quote width="auto" align="none" border="#002f56" color="#59a3d9" title="mencionó Giovanni D` Agostino, presidente para Latinoamérica de Newmark Knight Frank"]Es usual que las empresas no cuentan con un departamento especializado o encargado del portafolio inmobiliario. Por lo general son los gerentes los encargados de tomar decisiones y negociar las transacciones inmobiliarias (arrendamientos y compras). Esto representa un riesgo, ya que en muchos casos estos tomadores de decisiones no cuentan con experiencia suficiente en cada país y por ende desconocen las condiciones de mercado.[/quote]

Explicó, además, que al contratar a la firma especializada el agente se convierte en el aliado inmobiliario que defiende los intereses de la empresa y asegura que las condiciones de arrendamiento, o compra sean justas. Cuando se incorpora una solución integral los inversionistas tienen la confianza de que su proceso de apertura en el país está completamente cubierto; los estudios de factibilidad, el proceso de selección de sitios, análisis de ocupación; diseño e intervención del espacio y ocupación de este. Esto evidencia el rol integral como asesores, no solamente involucrándose en la transacción como tal.

En Cushman & Wakefield / AB Advisory, aseguran que buscan siempre brindar un acompañamiento estratégico a las empresas que pueden desconocer las dinámicas de los mercados locales.

Desde múltiples aristas como la económica, demográfica, nivel de sistemas de movilidad, el manejo de contratos de arrendamiento o de compraventa y en general, su norte es ofrecer una asesoría integral en cada una de las etapas de los proyectos y convertirse en el consultor local, es decir, en el experto que transfiere conocimiento a cada uno de sus clientes para asegurarles el éxito rotundo en sus operaciones, trascendiendo los aspectos inmobiliarios.

¿Es posible traducir la rentabilidad?

Si bien es difícil cuantificar el retorno económico en estos términos, Daniel Álvarez, Director General de Cushman & Wakefield / AB Advisory, expresó que se ha demostrado cómo a través de una asesoría profesional las compañías pueden disminuir su estructura total de gastos desde un 20 % hasta un 40%, en lo que se denomina “costos de instalaciones”, del inglés, “facilities cost”.

Sin embargo, más allá de los ahorros que se puedan generar, es fundamental que los clientes se aseguren que sus estrategias inmobiliarias respondan a objetivos del negocio y por ende, que van a fomentar el alto rendimiento de los equipos y de las operaciones para alcanzar metas no necesariamente ligadas a la reducción de costos operativos, sino también a elementos como: posibilidades de atracción, retención y desarrollo del talento humano, estructura organizacional y desarrollo de nuevas tecnologías, entre otros, que son de vital importancia para el éxito de cualquier organización.

Álvarez enfatizó que el retorno está en no ver los temas inmobiliarios como centros de costos, sino como una oportunidad que puede ser aprovechada para mejorar el desempeño corporativo a través de las estrategias adecuadas en bienes raíces.

Mientras que en KFN consideran que el retorno de inversión al contratar una consultora inmobiliaria es completamente variable. Sin embargo, la constante es que existe una relación directamente proporcional entre la prontitud en que se contraten nuestros servicios y los beneficios que generamos a nuestros clientes.

Un elemento muy importante y que la gente ignora, es que después de la planilla o la nómina el segundo gasto más significativo de una organización es el Real Estate.

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