El aumento del teletrabajo no equivale necesariamente a una menor demanda de oficinas

La demanda de espacio para oficinas está intrínsecamente vinculada a la economía; generalmente en una recesión, la demanda de la oficina disminuye a medida que los niveles de empleo caen y las empresas pasan al modo de preservación de efectivo. Firma JLL identifica cuatro factores clave en la configuración de futuros espacios de trabajo Por Redacción INversión INmobiliariainfo@inversioninmobiliariacr.com Foto: carácter ilustrativo (cortesía iStock). La demanda de espacio para oficinas está intrínsecamente vinculada a la economía; generalmente en una recesión, la demanda de la oficina disminuye a medida que los niveles de empleo caen y las empresas pasan al modo de preservación de efectivo. La pandemia ha empujado a una recesión global y en el corto plazo esto tendrá un impacto directo en la demanda de oficinas. Sin embargo, a la luz del éxito del trabajo a gran escala desde casa, ahora la pregunta es: a largo plazo, ¿será éste el catalizador para el fin de la oficina? Esta no es la ecuación directa que a menudo se describe como: El aumento del trabajo desde el hogar no equivale directamente a una menor demanda de espacio para oficinas. Hay una gran cantidad de otros factores que deben considerarse, incluida la densidad, los rendimientos financieros, la productividad y la tecnología. La firma Jones Lang LaSalle (JLL) resalta cuatro factores clave en la configuración de futuros espacios de trabajo: Teletrabajo: Hay claros beneficios para los empleados al trabajar desde casa, entre ellos, no hay desplazamientos y los horarios flexibles. Sin embargo, para muchas personas, sus arreglos de vida en el hogar hacen que trabajar desde casa sea una opción inferior a la óptima, con su espacio limitado, falta de privacidad y / o más distracciones. Además, los empleados extrañan la interacción social que trae la vida de la oficina. El mantenimiento de la productividad fuera de la oficina a largo plazo aún no se ha verificado y es probable que se vea impulsado por la interacción regular de la oficina. La flexibilidad será clave para la satisfacción de los empleados y el equilibrio de la oficina y el trabajo remoto desde cualquier lugar se basará en el individuo. Diseño de oficina: No hay duda de que COVID-19 acelerará algunos cambios en el diseño de la oficina. Lo más evidente es la densidad ocupacional. La tendencia al alza se ha revertido bruscamente a medida que se respeta el distanciamiento social. [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title=""]Sin embargo, una vez que esté disponible una vacuna o un tratamiento efectivo, es probable que haya un movimiento hacia las densidades registradas antes de COVID-19, pero no del todo, ya que la salud y el bienestar seguirán siendo una prioridad para los usuarios.[/quote] Es probable que se centre más en los espacios que enfatizan la interacción frente a frente, mientras el espacio de la oficina se rediseña o se reutiliza lejos del concepto de escritorios individuales de ocupación de jornada completa. Tecnología: Es improbable que la tecnología por sí sola tenga un impacto significativo en la demanda general de arrendamiento. A corto plazo, la adopción de nuevas tecnologías facilitará el trabajo remoto y también garantizará el bienestar y la eficiencia de los trabajadores cuando regresen a los edificios de oficinas. A largo plazo, se espera que la demanda de los usuarios gravite hacia edificios tecnológicos de oficinas inteligentes, lo que refleja su capacidad para apoyar las iniciativas medioambientales, de sostenibilidad, la salud y el bienestar de las empresas. Por lo tanto, parece probable una menor demanda de activos de baja calidad a largo plazo. Patrones del viaje al trabajo: La no necesidad de viajar es el beneficio más citado del trabajo desde casa y es una de las áreas que está causando mayor preocupación en el reingreso a la oficina, particularmente en aquellas ciudades que dependen mucho del transporte público. Es probable que una reentrada más lenta en muchas de esas ciudades. Algunas ciudades están promoviendo los beneficios del ciclismo o la caminata. A largo plazo, todavía se espera que la interacción cara a cara (tanto interna como externa) gravite hacia centros urbanos centralizados y con muchas comodidades. Estos factores apuntalarán la demanda y el valor de los mercados urbanos con servicio de tránsito a largo plazo. [quote width="auto" align="none" border="#013e76" color="#59a3d9" title="indicó la firma en un artículo"]La pieza final del rompecabezas es dónde se enfocará la demanda de la oficina: los patrones espaciales de la demanda de la oficina. Es probable que prevalezcan los atractivos inherentes de las ciudades en términos de oportunidades económicas, conexiones sociales y oferta de calidad de vida a pesar de las preocupaciones a corto plazo con respecto al distanciamiento social. Las fuerzas que ya estaban transformando nuestras ciudades antes de COVID-19 continuarán impulsando el cambio e impulsarán la demanda de las oficinas: digitalización y automatización, la ciudad responsable y la globalización.[/quote] La pandemia de COVID-19 ha sido otro shock extremo imprevisto para nuestro mundo con amplias consecuencias a corto y largo plazo. Habrá una corrección inevitable a corto plazo a medida que el impacto económico de la pandemia fluya hacia la actividad corporativa. Sin embargo, a largo plazo, la oficina seguirá siendo una parte fundamental de nuestra cultura corporativa y desempeñará un papel esencial en nuestro trabajo y productividad. La flexibilidad para trabajar desde casa se integrará perfectamente en la vida laboral, beneficiando tanto a los empleados como a los empleadores. © 2020. Revista Inversión Inmobiliaria SRL. Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción parcial o total.